Tras mucho tiempo pensándolo, me apetecía volver a escribir y que mejor que hacerlo con lo ocurrido hoy en Sevilla.
Última jornada de liga. La lucha por la salvación está entre el Getafe, el Sporting y el Rayo. De esos tres equipos solo uno puede salvarse y el que más fácil lo tiene es el Getafe, pues depende de sí mismo.
Pronto se adelantan los de Gijón y los de Vallecas. El Getafe se acerca con peligro pero sin ocasiones claras y el Betis jugando como si fueran ellos los que podian descender.
En la segunda parte, más de lo mismo. Los azulones estaban salvados desde la jornada 27, o así lo parecía por su modo de jugar. Sin embargo, el Betis seguía apretando y tras una jugada en la que el Getafe puede hacer el 0-1, los verdiblancos, en una jugada a balon parado, se adelantan. 1-0 y el Getafe a remontar. Poco más tarde y sin mejorar en su juego, el Betis sube el segundo a su marcador tras un penalti más que dudoso. De hecho, me atrevería a decir que no lo era. Emi, en un calentón por la situación, pega un patadón a un rival que bien merece la cartulina roja y asi lo demuestra el colegiado. A falta de pocos minutos, el Getafe consigue su primer gol, aunque de nada serviría pues ya estaban en segunda junto con el otro equipo madrileño.
Merecido descenso a Segunda tras la segunda pésima vuelta que ha realizado el equipo. Muchos buenos momentos vividos en el coliseum y ahora de vuelta a los infiernos. Toca volver a pelear y intentar regresar a jugar contra los grandes.
Mientras tanto, solo queda seguir disfrutando del futbol.
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